La movilización, encabezada por diversas organizaciones, busca visibilizar la crítica situación que atraviesan y garantizar la continuidad de los servicios para las personas con discapacidad.

El día miércoles 5 de junio a las 10 de la mañana, diversos trabajadores y prestadores de servicios de discapacidad llevarán a cabo una marcha en la capital cordobesa como parte de un reclamo que lleva varios meses en curso. Las organizaciones no gubernamentales y entidades dedicadas al cuidado de las familias y personas con discapacidad han experimentado retrasos prolongados en los pagos, lo que llevó a esta nueva movilización.

En una entrevista de  Crónica Matinal de Canal 10,  Fiorina Bourges, psicóloga y acompañante terapéutica, explicó que muchos prestadores aún no han recibido el pago completo de los honorarios correspondientes al primer trimestre de 2023, e incluso existen casos en los que se les adeudan prestaciones del año pasado. Esta situación crítica generó la suspensión de las prestaciones debido a la incapacidad de afrontar los gastos necesarios para realizar su labor.

La falta de pagos se ha convertido en una constante para los prestadores de discapacidad, con retrasos que suelen extenderse hasta 60 o 90 días.

La movilización partirá desde la sede central de  APROSS ( Marcelo T. de Alvear 758) hacia Patio Olmos, donde se llevará a cabo una clase pública y una asamblea para expresar sus reclamos y reivindicaciones. Según comentó la psicóloga Bourges, la situación de atraso en los pagos afecta a todas las obras sociales, pero APROS se ha vuelto emblemática en esta protesta debido a que, además de los retrasos, los honorarios que pagan están por debajo de lo establecido en el nomenclador nacional. Esta institución representa la precarización que sufren los prestadores y profundiza la política que los afecta.

Cuando se pregunta por qué se vive esta política de precarización, Fiorina menciona que se debe en parte a ajustes profundos en el sector de discapacidad y a cuestiones burocráticas relacionadas con el sistema de pago de salarios. Además, existe un fondo solidario de redistribución al que los trabajadores aportan el 10 o 15% de sus ingresos, pero los fondos no siempre son liberados por la Superintendencia de Salud a las obras sociales. La situación se ha vuelto más complicada debido a disputas y retenciones de fondos por parte de las propias obras sociales.

La marcha de los trabajadores y prestadores de salud está convocada para el miércoles a las 11 de la mañana en, y se invita a personas con discapacidad y a la población en general a apoyar este reclamo por los derechos laborales de todos los trabajadores del sector y por los derechos de las personas con discapacidad, para garantizar la calidad de las prestaciones y evitar la suspensión de tratamientos vitales.