Lo expuso el fiscal Luciani durante la séptima jornada de alegatos. Según la fiscalía, hubo órdenes directas de la vicepresidenta y de Néstor Kirchner.

Este martes se desarrolló la séptima jornada de alegatos del juicio que investiga si hubo direccionamiento de la obra pública vial en Santa Cruz en favor de las empresas de Lázaro Báez durante los gobiernos kirchneristas.

El fiscal federal Diego Luciani aseguró que la gestión de Cristina Kirchner sometió al Congreso a un «apagón informativo» y escondió parte de los «cuantiosos fondos públicos» que se destinaban a la provincia del sur del país.

«Desde el Poder Ejecutivo se subestimaron los presupuestos, se manejaron los excedentes a discreción y los legisladores nunca tuvieron la posibilidad de controlar lo que estaba pasando realmente con la obra vial de Santa Cruz. Lisa y llanamente, les mintieron«, sostuvo Luciani.

Para el fiscal, la vicepresidenta modificó los fondos de las obras y el Gobiero nacional «monopolizó el manejo». «Han modificado los presupuestos aprobados por el Congreso a instancias del ministerio de Planificación Federal de Julio De Vido», agregó.

Además, Luciani manifestó: «Cuestionaban licitaciones de 80 mil pesos, 60 mil pesos, y no se inmutaban con las obras de 600 millones de pesos que se adjudicaban en menos de 20 días. Hubo una ceguera intencional para aparentar un control que no existió. Cerraron los ojos«.

Órdenes directas de Néstor y Cristina Kirchner

Según los fiscales Luciani y Sergio Mola, las decisiones sobre los hechos partieron directamente desde la Presidencia de la Nación y saltearon a los jefes de Gabinete para llegar directamente a Julio de Vido. 

Explicaron también que esto muestra que la supuesta maniobra por la cual la fórmula no puede ser atribuida, en ningún grado de participación, a los exjefes de Gabinete, entre ellos el actual presidente, Alberto Fernández.