Se llevó a cabo una degustación en las instalaciones de Ikera Hotel, actividad en marco del Mes de la Mujer. La misma estuvo a cargo de la Sommelier Judith Barengo, “la idea es ampliar el paladar, cuando hacemos una degustación de este tipo”.

Judith en diálogo con Cada Mañana, aportó concejos a tener en cuenta para elegir un buen vino. “La idea es ampliar el paladar, cuando hacemos una degustación de este tipo la idea es que conozcamos mucho más sobre vinos, que no nos quedemos con lo que nos gusta sino también empezar a buscar cosas nuevas”, dijo.

La propuesta por parte de Ikera fue hacer una degustación con maridaje en comidas a cargo de la cocina del hotel. En primera instancia comenzaron con vinos blancos, entre ellos una novedosa combinación con malbec, un espumante rosé para brindar y un vino tinto.

“En las degustaciones empezamos de a poquito, siempre se sirven dos dedos nada más en una copa pero después el que quiere repetir repite. Al ser cuatro o cinco varietales que vamos a probar no termina siendo poquito así que es divertido”, añadió.

Entre las recomendaciones de Judith para elegir un buen vino debemos tener en cuenta el equilibrio entre los aromas y el sabor, tener en la boca buena acidez (vinos blancos) sin ser excesiva. Mientras que en los vinos tintos hay que encontrar los aromas sumado a los taninos que aportan cuerpo al vino. Acidez, alcohol y azúcar es la combinación equilibrada.

“Siempre empezamos desde el vino más joven y más tranquilo hacia los vinos que son más potentes, con más fuerza. Si yo empezara al revés los vinos más tranquilitos te parecerían demasiados livianos”, mencionó.

También aportó ejemplos de combinaciones entre vinos y comidas: un vino blanco Torrontés con empanadas salteñas o acompañado de mollejas; en vino tinto con asado y carnes de caza de fuerte sabor (si hablamos de nuestra zona el cordero es una buena opción).

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