Se llevó a cabo una audiencia pública como paso previo a la autorización formal del emprendimiento que supone el mayor impacto sobre la costa del lago.

El pasado jueves se llevó a cabo una audiencia pública relacionada con la licitación de paradores en el Complejo Piedras Moras, lo que representa un paso previo a la licencia ambiental que por su envergadura, demanda ese proyecto.

Se trata específicamente de tres espacios que fueron licitados en el área de la exPlaya Amarilla y el salón Coyote, que resultó demolido, para dar lugar al proyecto del Tigero Group, del cual se destacará la disposición de contenedores transformados en locales gastronómicos y comerciales.

El subsecretario de Desarrollo Urbano, Lucas Santa, uno de los expositores en la audiencia, explicó que sólo este sector requirió licencia ambiental. Si bien la licitación abarcó a más paradores que ya funcionan desde el verano pasado, en el resto se trató de una “puesta en valor de lo existente”, lo que incluyó entre otras mejoras, conexión al sistema cloacal del barrio lindante, Tierras del Fundador.

Sobre los avances de obra que el Municipio ya permitió en el lugar con permisos provisorios de la Secretaría de Ambiente de la Provincia, según afirmaron, el funcionario resaltó que no se avanzó sobre bosque nativo, no extrajeron vegetación y se cumplió con la resolución de APRHI (Administración Provincial de Recursos Hídricos de la Provincia), sobre el vertido de efluentes.

Además de brindar detalles del proceso de licitación, la exposición del funcionario también abarcó el relevamiento de todo lo existente antes de la intervención en cuanto a pozos negros y absorbentes, cámaras sépticas, infraestructura precaria e irregularidades en las instalaciones eléctricas y de gas. A su vez, citó una encuesta realizada entre 200 vecinos de la ciudad para evaluar todas las políticas públicas de la actual gestión, destacando que esta licitación arrojó una aceptación superior al 93 por ciento.

Se aguarda que en un lapso aproximado de 15 días posteriores a esta audiencia que no era vinculante, puedan contar con la licencia ambiental y para este verano ya estarían en funcionamiento dos locales del proyecto de Tigero.

“Todo proyecto que genere cambios en ciudades chicas como la nuestra, al principio puede generar resistencia en algunas personas pero cuando la gente empieza a ver que está prolijo se pone feliz porque también entienden que detrás de eso se generan fuentes de trabajo”, afirmó Santa.

Los cuestionamientos de la oposición

Desde Hacemos por Almafuerte, principal espacio político opositor a la gestión municipal, expresaron sus cuestionamientos en relación a lo observado en la audiencia pública.

En primer lugar, aclararon que estuvieron de acuerdo con la propuesta de mejorar la calidad de la explotación turística del Lago Piedras Moras y por ello oportunamente, aprobaron la ordenanza que estableció los requisitos para los concesionarios privados de los paradores.

En cuanto al Estudio de Impacto Ambiental presentado por la Municipalidad en la audiencia, rechazaron que solo sea de aplicación para tres sectores y no todos los demás concesionados que ya están funcionando.

Para argumentarlo, recuerdan que en el último fin de semana largo, hubo baños taponados y la planta de cloacas del barrio Tierras del Fundador, a la que están conectados los paradores, resultó insuficiente, por lo que fue necesaria la presencia de un camión atmosférico para retirar líquidos residuales. Por esta razón, entienden que deberían contar con su propia planta de tratamiento cloacal, como se exige para cualquier loteo cercano al lago. También solicitan los informes de auditores sobre la gestión de ruidos molestos, que generan quejas de los vecinos del sector.

A modo de conclusión, sostuvieron que el Estudio de Impacto Ambiental, es “parcial, superficial y carente de sustento fáctico”.

FUENTE: Tribuna