Los tres representantes de la Provincia en la Cámara Alta, Laura Rodríguez Machado y Ernesto Martínez (Juntos por el Cambio) y Carlos Caserio (Frente de Todos), avalaron con su voto la aprobación de la histórica ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo.

Los tres senadores nacionales por Córdoba, Laura Rodríguez Machado (Juntos por el Cambio – PRO), Ernesto Martínez  (Juntos por el Cambio – Frente Cívico) y Carlos Caserio (Frente de Todos) votaron a favor del aborto legal, conservando la misma postura que hace dos años cuando la iniciativa tuvo tratamiento durante el gobierno de Mauricio Macri.

Rodríguez Machado y Caserio pronunciaron sus fundamentos durante la histórica sesión que aprobó la ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo (ILE), mientras que Martínez optó por no hablar durante su turno.

Aunque los tres se manifestaron a favor en la votación general, al votar cada artículo en particular, los dos legisladores del bloque macrista se abstuvieron respecto del artículo 16. Ese apartado modifica el artículo 86 del Código Penal y fue motivo de varios cuestionamientos que llevaron al compromiso del oficialismo kirchnerista de suprimir en la reglamentación el término “integral” en un párrafo del articulado.

El Código Penal ahora expresa que “no es delito el aborto realizado con consentimiento de la persona gestante hasta la semana catorce (14) inclusive del proceso gestacional”.  Además, establece que fuera de ese plazo, no será punible el aborto si el embarazo fuera resultado de una violación o si “estuviera en riesgo la vida o la salud integral de la persona gestante”. La senadora informante por el oficialismo, Norma Durango, anticipó que el término “integral” será modificado en la reglamentación “para dar claridad al objetivo de la propuesta que es mantener las causales de la interrupción legal del embarazo vigentes desde 1921”.

En su discurso, el senador cordobés Caserio  manifestó que “es urgente ver la realidad y hacerse cargo, porque el consenso ganado es que el aborto sucede y que las condiciones no son las mismas para todas, no debemos aceptar que haya quienes pueden acceder a prestaciones privadas y hacer como si no pasara nada para dejar que sea un negocio clandestino de algunos privados”.

“Donde el Estado no está, existe siempre mayor desigualdad”, reafirmó Caserio.