Con la apertura turística, trabajadores estiman que retornaría el 25% del servicio. Provincia y las empresas deben abonar deudas que derivaron en un extenso paro.

La decisión del gobierno nacional de autorizar nuevamente el tránsito interurbano parece ir de la mano con los anuncios que en materia turística realizó este lunes el gobernador Juan Schiaretti.

Sin embargo, un paro de los choferes extendido por más de siete meses debido a la falta de pago de parte de las empresas y la falta de respuestas oficial marcó el pulso en la provincia de Córdoba.

Desde el 13 de abril que no circuló ningún colectivo por las rutas cordobesas. «Nosotros tomamos la medida sin saber lo que se venía. Ha sido un desastre, impensado e interminable» remarcó este martes Emiliano Gramajo.

El secretario general de la Asociación de Obreros de la Industria del Transporte Automotor (Aoita) cuestionó a las firmas porque «muchos compañeros no cobraron en este tiempo la totalidad de los salarios» y a la Provincia porque «le fue conveniente el paro y con esa excusa suspendió el servicio mucho después debido a un argumento sanitario».

Gramajo sentenció: «Nosotros buscamos en todo momento volver a trabajar, pero fue imposible. Pero fuimos los únicos que intentamos explicarle al ciudadano qué pasaba».

Además remarcó que en las próximas dos semanas los empleados deberían cobrar los salarios atrasados, antes de la rehabilitación del servicio.

«Nosotros somos 4.200 empleados, pero estimamos que unos mil volverían. Así que seguiremos buscando soluciones», concluyó.