Tras la confirmación del jury, el hijo de Nora Dalmasso pidió la destitución de los tres fiscales. También exigió que Roberto Bárzola sea juzgado, aunque la causa esté prescripta.

A pocas horas de confirmarse la apertura del jury de enjuiciamiento contra los primeros tres fiscales que intervinieron en el caso por el femicidio de Nora Dalmasso, su hijo, Facundo Macarrón, habló públicamente y fue categórico: calificó a los funcionarios judiciales como “burros”, los acusó de cometer “barbaridades” y reclamó que sean destituidos por el daño que ocasionaron en una causa que lleva 19 años sin justicia.

“Son unos burros, cometieron barbaridades y tienen que ser destituidos”, dijo sin rodeos en diálogo con Radio con Vos, y agregó: “Esto no va a enmendar el daño gravísimo que hizo una persona que violó y mató a mi mamá y sigue suelto”.

Críticas a los fiscales y reclamo de destitución

El jury involucra a Javier Di Santo, Daniel Miralles y Luis Pizarro, quienes condujeron la investigación durante los primeros años. Para Facundo, su desempeño fue devastador para la búsqueda de justicia:
“Tenemos fiscales en Río Cuarto que son monos con navaja. Tienen en sus manos la vida y la libertad de la gente y siguieron actuando como si nada, aun habiendo cometido delitos enormes en sus funciones”.

El joven sostiene que los fiscales cedieron a presiones sociales y mediáticas: “Se dejaron llevar por prejuicios sociales, abandonaron el mandato constitucional. Han destruido muchísimas familias. Esperamos su destitución”.

La familia insiste: “Bárzola es el responsable”

Macarrón también se refirió al parquetista Roberto Bárzola, señalado por el ADN presente en el cinto de la bata de la víctima y sobreseído hace apenas un mes por prescripción de la causa.

La situación reavivó la angustia familiar: “Hace un año supimos lo que creemos que es la verdad después de la prueba. La Cámara del Crimen no valoró nada de lo que planteamos y nos dejó sin un juicio por la verdad”.

Facundo recordó que Bárzola había estado en la casa familiar días antes del crimen y que incluso había tenido una discusión con Nora por cuestiones laborales: “Mi mamá tenía un carácter fuerte, era muy empoderada, y es probable que eso haya influido. Un forense nos hizo un informe privado y apuntaba a los obreros”.

También destacó que, desde el inicio, la hipótesis sobre los trabajadores estaba sobre la mesa: “El FBI encontró el ADN completo de una persona y sugería investigar a los obreros que estuvieron ese día, especialmente a Bárzola. Lo tenían en sus narices y prefirieron crear hipótesis absurdas como el vuelo de mi papá o supuestas peleas inventadas”.

“Nos persiguieron más que investigaron”

Facundo recordó los años en los que él y su padre fueron imputados: “Antes de que me imputaran a mí ya había una mala praxis judicial, como pasó con Gastón Zárate en el perejilazo. El pueblo no quería que fuera un obrero, querían que pagaran los ricos, y por eso los fiscales no fueron más contra un trabajador”.

Para los Macarrón, la investigación se desvió por prejuicios y presiones externas.

Esperanza en un juicio oral y reclamo internacional

A pesar del sobreseimiento de Bárzola, la familia no renuncia a su objetivo: llevarlo a juicio oral y público.
“Queremos que se determine o no su culpabilidad. Sufrimos violencia institucional al no poder pedir justicia porque fuimos perseguidos dos tercios del proceso”.

Apelaron la decisión ante Casación y esperan un fallo que permita avanzar: “Es innovador, tiene una sala penal en violencia de género de vanguardia. Si no nos dan la razón iremos a la Corte Suprema o incluso a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos”.

Con casi dos décadas de sufrimiento, Facundo Macarrón afirma que seguirá reclamando justicia por su madre: “Esto nos atraviesa desde hace 18 años. No vamos a dejar de luchar”.