Presupuesto 2026, control de fondos públicos, obras cloacales y ordenanzas urbanísticas marcaron una jornada cargada de discusiones y exposiciones técnicas.

El Concejo Deliberante de Hernando realizó este miércoles una extensa sesión en la que se abordaron temas de alto impacto institucional, económico y urbanístico. El debate estuvo atravesado por cuestionamientos de la oposición, defensas del oficialismo y la decisión de enviar a comisión diversos expedientes que requieren mayor análisis técnico y legal.

El Presupuesto 2026 fue uno de los ejes centrales de la jornada. El oficialismo, a través del concejal Elías Balbuena, respondió a los cuestionamientos planteados por la oposición, que volvió a pedir la presencia del secretario de Hacienda, Gustavo Laróvere, para profundizar los fundamentos de la tarifaria y del esquema financiero previsto para el próximo año. Manifestaron que la información aportada hasta el momento resulta insuficiente y las respuestas no han sido claras. Ambos bloques continuarán intercambiando devoluciones técnicas entre sus equipos contables y el tratamiento seguirá en comisión.

La sesión también incluyó un debate sobre las obras cloacales para los barrios Norte, San Blas y Ameghino. Ingresaron dos proyectos para autorizar al Ejecutivo a formalizar la obra y declararla de “utilidad pública y de pago obligatorio”, con un aporte estimado de 400.000 pesos por frentista. Somos Hernando advirtió que la Municipalidad no habría cumplido con procedimientos obligatorios previos, como la presentación formal del proyecto a los vecinos y la apertura del registro de oposición, lo que —manifestó— podría vulnerar la normativa que regula la contribución por mejoras. Ante estas observaciones, ambos expedientes fueron enviados a comisión para requerir documentación, informes técnicos y aclaraciones legales antes de continuar su tratamiento.

Otro tema destacado fue la presencia del arquitecto municipal Guillermo Casaux en el marco del proyecto “Vereda Segura – Hernando Accesible”. El profesional realizó un detalle del Código de Edificación vigente desde 2018, que establece exigencias diferenciadas para veredas céntricas y de zonas adyacentes. Indicó que el costo de construcción por metro cuadrado ronda los 30.000 pesos y que una vereda completa, con sus dimensiones y materiales adecuados, puede implicar entre 4 y 5 millones de pesos por frentista, lo que dificulta su cumplimiento en el contexto económico actual.

También recordó que las rampas de accesibilidad en esquinas ya están contempladas en el código y son obligación de los frentistas. La oposición señaló que un relevamiento previo evidenció incumplimientos generalizados y el proyecto será analizado nuevamente en comisión.

También se trato la Ordenanza N° 5/2016, que establece que el municipio destina el 0,5% de su coparticipación al Ente de Cooperación de Municipios y Comunas vinculado al Foro de Intendentes de la UCR. Los concejales opositores argumentaron que este año el aporte ya supera los 13 millones de pesos y proyecta alcanzar los 16 millones, fondos que —según plantearon— deberían priorizarse en necesidades locales. El oficialismo defendió la continuidad de la normativa al considerar que se trata de un espacio importante de articulación regional y la derogación fue rechazada por mayoría simple, aunque la oposición adelantó que insistirá en reabrir el debate.

En cuanto a los proyectos vinculados a la Transparencia Municipal, Ciudad Cardioprotegida y la actualización del Libro Segundo del Código de Faltas, todos continuarán en estudio, ya que requieren revisiones adicionales y precisiones técnicas antes de volver al recinto.