
En medio de la niebla y ausencias de gobernadores, Milei suspendió el viaje a Tucumán por el 9 de Julio
julio 8, 2025
Leandro Paredes destrabó su salida de la Roma y ya es nuevo jugador de Boca
julio 8, 2025El Comité Provincia convocó a una reunión virtual para delegar decisiones en el Congreso partidario. Ramón Mestre criticó la medida y acusó a Marcos Ferrer de actuar como representante de un sector y no como presidente del partido.
La interna de la Unión Cívica Radical (UCR) de Córdoba volvió a escalar este martes, luego de que el Comité Provincia, presidido por Marcos Ferrer, convocara a una reunión virtual con el objetivo de trasladar decisiones clave al Congreso partidario, lo que según referentes del espacio opositor, podría derivar en la suspensión de las elecciones internas previstas para las próximas semanas.
Uno de los primeros en reaccionar fue el exintendente de Córdoba y referente del radicalismo provincial, Ramón Mestre, quien acusó a Ferrer de actuar como «delegado de un espacio interno» y no como presidente de un partido con tradición democrática. “No es un kiosco, es un partido de la democracia”, sostuvo con dureza.
La reunión, que se realizará vía Zoom, buscaría votar una moción para que sea el Congreso del partido el que defina si la UCR está habilitada o no a conformar alianzas electorales. No se discutiría con qué fuerza se haría, sino si el partido puede o no hacerlo.
La estrategia fue interpretada por sectores internos como una maniobra para evitar la convocatoria a internas en agosto, lo que generó fuertes críticas de la oposición interna, que denuncia un intento por limitar la participación de los afiliados.
Además, desde el sector disidente señalaron que se realizaron nuevas presentaciones judiciales. “Hoy hicimos una nueva presentación porque el plazo venció ayer para presentar las escuelas y los padrones. La Justicia los va a volver a intimar, pero ya casi no hay tiempo”, advirtieron desde el entorno de Mestre.
Para el también exsenador nacional, la conducción de Ferrer está incurriendo en una “irresponsabilidad institucional” que debilita al partido y agrava la crisis interna que atraviesa la UCR provincial.
Con el calendario electoral ajustado y una creciente fractura interna, la UCR de Córdoba enfrenta semanas decisivas, en un clima de desconfianza y puja por el control partidario.