Luego de un fin de semana con máximas superiores a los 30 grados, la humedad se hará presente de manera paulatina y la llegada de las precipitaciones estaría garantizada.

El primer fin de semana de octubre estuvo protagonizado por el calor. Si bien se esperaba que el tiempo seco y sofocante se prolongue unos días más, la llegada de las lluvias es inminente y se daría en la jornada del lunes. Esto despierta ilusión para muchos ya que se estima que la provincia no tuvo precipitaciones significativas en los últimos cinco meses.

La nubosidad empezó a tener mayor presencia desde el atardecer del domingo. El lunes también amanecerá con el cielo encapotado y se espera un marcado descenso de las máximas, con una temperatura prevista de 22 grados por la tarde.

El primer día de la semana se presentará como una jornada clave ya que será allí cuando las primeras lluvias podrían comenzar a aparecer en el horizonte. El martes ya habría varios chaparrones dispersos por diferentes puntos de la provincia, incluyendo varias aéreas serranas. Durante la tarde el cielo se despejará y las precipitaciones se apaciguarán. Aún así volverán a hacerse presentes en el cielo de manera intermitente hasta el final del miércoles.

Por último, el día miércoles se producirá una entrada de aire fresco y bajarán lastemperaturas hasta llegar a los 18 grados. Esta llegada de las lluvias a Córdoba significaría un verdadero alivio en relación a la angustiante situación que se vive con los incendios en diferentes puntos serranos del territorio provincial.

En ese marco, desde la Secretaría de Gestión de Riesgo Climático informaron que no hay focos activos. “Los focos de Quebrada de la Mermela, Berrotarán y San José de la Dormida fueron contenidos y hay guardias de cenizas”, especificaron.

Asimismo, informaron que la Ruta Provincial 28, en el Valle de Traslasierra, continúa cortada por desprendimiento de rocas.