Las precipitaciones trajeron alivio a la provincia, pero aún no fueron suficientes en algunos sectores. 

Las lluvias que llegaron a Córdoba el lunes, y que continuaban este miércoles en varios sectores de la provincia, trajeron alivio a muchas zonas afectadas por los incendios del último mes. Sin embargo, no fueron suficientes para los ríos ya que el militraje caído fue muy dispar según la jurisdicción.

En La Falda, cayeron ya 25 milímetros. En tanto, el jefe de Bomberos de Cosquín, José Molina, anticipó que el aporte al río San Francisco generará una crecida de medio metro al llegar a la ciudad.

El secretario de Infraestructura Hídrica y Gasífera de Córdoba, Edgar Castelló, destacó en diálogo con Cadena 3 que las precipitaciones fueron «bastante variables según la zona». 

Las lluvias de la madrugada de este miércoles concentraron en el departamento Río Tercero; mientras que las del martes por la afectaron más a la zona serrana de manera uniforme y poco intensa.

De todas maneras, Castelló resaltó la importancia de este tipo de lluvias y explicó por qué es bueno que no sean agresivas. «Esto hace que no se genere tanto arrastre de material y cenizas, lo que resulta beneficioso en áreas afectadas por incendios».

Además, mencionó que las crecientes en los ríos estuvieron «dentro de valores normales», sin presentante niveles acumulados de consideración y que los diques han mostrado un leve ascenso en sus niveles.

El San Roque subió tres centímetros y Los Molinos cinco centímetros. Casteló aclaró que el efecto de la lluvia en los diques no es inmediato, ya que hay una propagación dentro y que el ascenso se verá reflejado entre 48 y 72 horas después de las precipitaciones.

El funcionario remarcó que «es más beneficiosa este tipo de lluvia», ya que permite una mayor infiltración y recarga de las cuencas, lo que resulta en un alivio significativo, a pesar de la falta de lluvias intensas.