Cancillería emitió un comunicado ante la denuncia de intento de golpe de Estado en el país vecino. “La democracia no se negocia”, expresó Diana Mondino.

La movilización de militares hacia el palacio presidencial en Bolivia provocó el repudio del Gobierno argentino entre distintos referentes de la comunidad internacional.

“La República Argentina reafirma la defensa irrestricta de la democracia en la región y condena todo intento de quebrantarla”, expresó Cancillería en un comunicado difundido este miércoles.

Ante la tensión registrada en horas de la tarde, agregaron que el Gobierno nacional “repudia las movilizaciones irregulares de algunas unidades del Ejército boliviano y expresa su firme apoyo al Estado de Derecho, mientras remarca la importancia de sostener las instituciones democráticas en el Estado Plurinacional de Bolivia.

Momentos antes la canciller Diana Mondino había compartido una publicación sobre lo acontecido en Bolivia y afirmó que “la democracia no se negocia”.

“Los gobiernos, sean buenos o malos, gusten o no, se cambian únicamente en las urnas. No se cambian con violentos golpes de Estado”, expresó la funcionaria.

Momentos antes el presidente boliviano Luis Arce denunció un intento de golpe de Estado en ese país, a partir de movimientos irregulares de unidades militares encabezadas por el coronel Juan José Zúñiga, quien este miércoles continuaba como jefe del Ejército pese a que había sido removido del cargo.

Con el paso de las horas finalmente se efectivizó el desplazamiento de Zúñiga quien terminó detenido. Además el presidente Arce le tomó juramento a la nueva cúpula militar.

Condena internacional

Uno de los primeros pronunciamientos internacionales fue el de Luis Almagro, secretario General de la Organización de los Estados Americanos (OEA), quien condenó lo sucedido y recalcó que “el Ejército debe someterse al poder civil legítimamente elegido”.

“Enviamos nuestra solidaridad al Presidente de Bolivia, Luis Arce Catacora, su gobierno y todo el pueblo boliviano. La comunicad internacional, la OEA y la Secretaría General no tolerarán ningún quebrantamiento del orden constitucional legítimo en Bolivia o cualquier otro lugar”, concluyó.

En el transcurso de la tarde se expresaron los presidentes Luis Lacalle Pou (Uruguay), Lula da Silva (Brasil), Santiago Peña (Paraguay), Gabriel Boric (Chile) y Gustavo Petro (Colombia).