El candidato a gobernador de Hacemos Unidos por Córdoba apuntó a la Justicia Electoral y dijo que son «los más perjudicados» por no poder festejar.

Mientras el recuento de votos apenas alcanzaba el 88% pasada la 1.30 de la mañana y la diferencia era de menos de tres puntos ante Luis Juez, Martín Llaryora se declaró ganador de la elección a gobernador de Córdoba.

En un clima de fiesta y con arenga previa ante la militancia, el candidato de Hacemos Unidos por Córdoba subió al escenario montado en el hotel Quórum junto a su candidata a vice, Myrian Prunotto. Desde abajo observaba Juan Schiaretti, quien los acompañó hasta metros antes de aparecer en escena pero decidió no hablar.

Llaryora fue presentado como «el gobernador electo» por el locutor y no dudó en celebrar. «Quiero agradecerles a todos por tanto afecto. No hay más perjudicados que lo que nos está pasando a nosotros, a esta altura en una provincia como la nuestra tendríamos que tener todos los resultados y no los tenemos», reprochó ante la demora del recuento.

De todas maneras, resaltó los «50 mil votos de diferencia» con el 90 por ciento escrutado y calificó a esa tendencia como «irreversible». «Uno no puede festejar como nos merecemos, vamos a esperar», aclaró.

«La tendencia ya está», insistió y continuó: «Me da mucha pena también porque a esta altura, con la provincia que tenemos, con la tecnología que tenemos, no puede ser que no tengamos el escrutinio».

Luego de repasar su gestión, convocar a votar en la municipal por Daniel Passerini y ponderar a Schiaretti, lanzó: «Ganamos la Provincia, viva Córdoba carajo».

De confirmarse su ventaja de poco menos de tres puntos en el escrutinio definitivo, el actual intendente de Córdoba asumirá la gobernación provincial el 10 de diciembre. Será la primera vez de un peronista después de 24 años de alternancia entre José Manuel de la Sota y Schiaretti.

El gobernador saliente este fin de semana oficializó su precandidatura presidencial en representación de Hacemos por Nuestro País, acompañado en la fórmula por Florencio Randazzo, que también llegó a la ciudad para la celebración.