Tras una sucesión de focos y situación muy compleja, en dos semanas se habría quemado 10 veces más que en ocho meses de este año. El alerta se mantiene. Hablamos con José Macías, Jefe del cuartel local y subdirector de operaciones de la Federación de Bomberos Voluntarios de la Provincia.

Tras 12 días consecutivos de bomberos corriendo de un foco a otro y de aviones hidrantes para los que se debía elegir cuáles priorizar y cuáles dejar para después, Córdoba respiró finalmente este lunes. Las tenues lluvias aportaron el mínimo de humedad y de frío que hacía falta para cortar una racha complicada de incendios forestales y rurales.

“Tuvimos días complicados y principalmente porque fueron en los cuatro puntos cardinales de la provincia que se vieron afectados, cuando lo tenes sectorizados en la zona forestal a los incendios tenes más recursos para atacarlos”, dijo José.

Macías mencionó que en la zona de Alpa Corral, el incendio consumió 4.500 hectáreas en tres horas, “se hizo un gran trabajo en conjunto con los productores que sirvió para contener los incendios rurales en menor tiempo posible”.

En sólo 12 días cambió el mapa del fuego de este año en Córdoba. Hasta el martes 6 de septiembre, se estimaba que se habían quemado, en ocho meses, unas cinco mil hectáreas. Pintaba para uno de los años de menor afectación en las últimas décadas. Pero en esos 12 días de muy baja humedad, prolongada sequía y fuertes vientos, una sucesión de fuegos multiplicó la tierra arrasada por las llamas.

No hay aún cifras oficiales, pero algunas estimaciones muy preliminares hacen elevar el cálculo quizá a entre 40 mil o 50 mil hectáreas. “No se tiraron las cifran finales, nomás en el incendio que comenzó en el área de Panaholma y Villa Cura Brochero se quemaron una 7.500 hectáreas”, destacó.

El año pasado, que también fue complejo, hubo 66 mil hectáreas bajo fuego en Córdoba. No fue el peor en superficie, pero sí lo fue en otros impactos: tres personas muertas y casi 70 viviendas quemadas marcaron un récord negro en 2021. En 2020 había sido el pico de mayor suelo afectado en 33 años: 341 mil hectáreas ardieron en Córdoba.

PLANIFICAR MÁS Y MEJOR: El referente de la federación bomberil insistió que hay una legislación de cuál es la forma de proteger las viviendas, “es un círculo que consta de tres etapas donde el que está pegado a la vivienda solo podes tener pasto, luego la zona de arbusto y el tercer circulo la forestación, pero que pasa, la gente no lo quiere tocar por el pasaje pero hay que sacrificar una pequeña cantidad para proteger una gran cantidad”, marcó.

ALERTA POR LO QUE VIENE: Esta semana parece más aliviada la situación, con más humedad y pronósticos de lloviznas. “Pero octubre y noviembre serán complicados, si es que no aparecen buenas lluvias”, advirtió José. La provincia sigue en riesgo extremo en la zona serrana y moderado/alto en la zona llana.

VIDEO: Entrevista José Macías.