S dictó el segundo módulo del Ciclo de Fortalecimiento Familiar, iniciativa del área de Salud Preventiva de la Municipalidad. La disertación estuvo a cargo de la Lic. en Psicología Natalí De Grandis. «Hacemos referencia a lo que se ve en la familia, en primera instancia ver a sus peques, de poder ver las necesidades e interpretarlas y dar una respuesta sensible a éstas», dijo.

El principal eje de este módulo tiene que ver con la toma de decisiones, un tema que preocupa a la familia por los múltiples factores de riesgos a los que se exponen los adolescentes, entre ellos consumo de drogas. «La pregunta de las mamás y papás es ¿Qué me da más seguridad de que mi hijo el día de mañana pueda decir no a esto o poner un límite? Y de ahí devienen todos estos factores que se desprenden: el autoestima, la confianza, la autonomía.  La idea es poder darles una mirada práctica, es decir cómo concreto o ayudo a desarrollar un autoestima saludable, cómo ayudo a tomar decisiones y a dar confianza«, precisó.

A través de ello la persona, desde que tiene 2 años en adelante, puede tomar su decisión por ejemplo sobre qué ropa quiere ponerse, o qué quiere comprar en un supermercado, entre otros.

Ver y hacerles sentir a los presentes que sus necesidades son escuchadas y validar la emoción es la clave y la herramienta a poner en práctica. Al respecto sostuvo que «por ahí, por una cuestión de total amor y cuidado, tratamos de salvarlos de los distintos desafíos que puedan tener en lo cotidiano, por ejemplo si se golpea «no pasa nada» o «no le tengas miedo a tal cosa, eso no existe». Cuando nosotros tenemos esa actitud en realidad lo que hacemos es poner distancia entre lo que siento y lo que hago, si tiene miedo está bien. En vez de salvarlo hay que tratar de que experimente la emoción que sea y que tenga recursos para afrontarla. Decirles «yo confío en vos, podes con esto» es una forma de ayudarlos».

Si la situación fuese al revés, es decir el miedo no es del niño o adolescente sino de los propios padres y a su vez lo transmiten a sus hijos, la clave sería trabajar en nuestra historia personal y observar que es lo que me está generando un desafío a mí. Puede ser el tránsito de la niñez, de la infancia, la pubertad a la adolescencia ya qué el desafío de soltarla por ahí -indicó- genera mucho temor, por lo tanto hay que trabajarlo en uno para no heredar esos temores y no generar relaciones de sobreprotección o dependencia. «Por ejemplo, le van a poner la vacuna y yo se que va a llorar, se va a poner mal y voy a terminar desmayada (yo mamá), hay que ver si hay alguien que puede acompañar y reemplazar en ese momento para ayudar a transmitirle la seguridad que necesita», explicó.

Para mayor ayuda la profesional propone construir un red para aquellos papás y mamás que se encuentran solos en la crianza de sus hijos y ante los múltiples factores de estrés de lo cotidiano que van complejizando la posibilidad de contactar con ellos: falta de trabajo, violencia, enfermedades, entre otros.

«Lo que se ha visto acá (en Hernando) es la intención amorosa y del cuidado de las familias. Más allá de que todos cometemos errores en la crianza hay una predisposición para hacerlo mejor, para crecer«, cerró.

El próximo encuentro se llevará a cabo el 13 de Junio a las 14hs en la Casa del Deportista. Se tratará de relación emocional en la infancia.