Intelectuales sobre el FdT – «Lo que se presenta como moderado termina siendo débil»
marzo 22, 2022“HERNANDENSES POR EL MUNDO” – Matías Pavan desde Europa
marzo 22, 2022El ex presidente fue muy crítico con Alberto Fernández y afirmó que «no le cree nadie en el país, menos el mundo”. Además se refirió al ataque con piedras al despacho de Cristina Kirchner.
Mauricio Macri volvió a aparecer en público, por primera vez desde que se concretó el acuerdo entre el Gobierno nacional y el FMI. En una entrevista con LN+, el ex mandatario atacó fuertemente a la gestión de Alberto Fernández y dejó varias definiciones sobre la economía en Argentina.
“Hubo una cantidad de gente que se tentó con la musiquita del asado gratis, vengan con nosotros que tenemos soluciones fantasiosas que no significa ni que tengamos que trabajar. Y volvimos para atrás. Pero el mundo nos dio una mano de verdad. Quieren poner al préstamo como el culpable de todo”, opinó Macri.
Sobre el último discurso que realizó Fernández, el ex presidente manifestó: «Fue el no-discurso. Ya hoy no le cree nadie en la Argentina, menos en el mundo. Le ha hecho mucho daño a la institución presidencial». Además aseguró que el jefe de Estado «no sabe dónde está parado, no sabe a dónde tiene que ir, ni sabe cómo ir”.
El dirigente de Juntos por el Cambio también defendió el préstamos que tomó del FMI hace unos años atrás. «El 80% de los argentinos estaban a favor del acuerdo, porque entendían que estar en el lugar del incumplidor era volver a quedarse marginado del mundo. Y sin ser parte del mundo no tenemos futuro”, sostuvo.
«No vamos a creer más que el Fondo es el cuco. Es el espejo que muchos años los argentinos no quisimos mirar: es el espejo de los otros países que te dicen ‘vos tenés que hacer lo mismo que nosotros y arremangarte para construir un país. No podés vivir de prestado y echándole la culpa a los demás», agregó en ese sentido.
Acerca de los incidentes ocurridos en el despacho de Cristina Kirchner, Macri habló de las «14 toneladas de piedras» que se arrojaron contra el Congreso mientras se buscaba debatir la reforma jubilatoria a fines de 2017.
«En ese momento estaba bien tirar piedras, ahora la vicepresidenta está preocupada porque le tiraron piedras. No se preocupó tampoco por los policías», comentó en tono de burla.