En el plenario de comisiones de Diputados se expresaron posturas a favor de la refinanciación de los 44 mil millones de dólares y evitar el default.

La segunda jornada de debate sobre el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, en el plenario de comisiones de Diputados, tuvo como protagonistas a gobernadores, cámaras empresarias y entidades gremiales.

Entre los gobernadores presentes llamó la atención la participación del mandatario de Jujuy, Gerardo Morales, quien también ostenta el cargo de titular de la Unión Cívica Radical.

«Estoy convencido de que acá van a surgir los mecanismos para que la Argentina tenga ley. Tenemos que salir con ley, con la aprobación del acuerdo. Tenemos que salir impidiendo el default porque va a complicar la economía y cuando se complica la economía se joden los pobres», afirmó Morales.

Otro de los mandatarios presentes fue el gobernador de Santa Fe, Omar Perotti, quien manifestó: “Tenemos que resolver un crédito que no pedimos, que no usamos y que hay que pagar. Esta situación amerita el mayor nivel de análisis como responsabilidad de país para el cumplimiento de los compromisos y lo que significaría el default”.

Dentro del mundo empresario participaron representantes de Unión Industrial Argentina (UIA), Grupo de los 6, CAME, CGERA (Confederación General Empresaria, IPA (Industriales Pymes Argentinos), de la Fundación PRO TEJER, Apyme (Asamblea de Pequeños y Medianos Empresarios) y de ENAC (Empresarios Nacionales por el Desarrollo).

En su exposición el presidente de la Sociedad Rural, Nicolás Pino, afirmó: «estamos convencidos que mucho peor sería el escenario de un default. Venimos de un sector que con un simple apretón de manos firmamos un acuerdo y respetamos la palabra y nos parece conveniente hacerlo”.

Al debate legislativo también miembros la CGT, de la CTA, de la Corriente Federal de Trabajadores, CTA Autónoma, del Conicet.

Héctor Daer, secretario general de la CGT, manifestó su respaldó absoluto al acuerdo para refinanciar la deuda con el Fondo. En este sentido remarcó “Es la primera vez en la historia de las discusiones con el Fondo Monetario Internacional que no se hace con el lomo de los trabajadores”.