El saliente senador dejó su banca pese al pedido del resto de legisladores para que siga. Su emotivo último discurso en el Parlamento.

Esteban Bullrich formalizó este jueves lo que ya había anticipado hace dos días con una carta. El legislador de Juntos por el Cambio renunció a su banca en el Senado para dedicarse a su familia y preservar su estado de salud.

El senador, que fue diagnosticado de ELA en abril pasado, llegó al Congreso de la Nación acompañado por su familia. En una emotiva sesión, Bullrich le agradeció a sus seres queridos y pares, y aseguró que deja su banca «con profunda tristeza».

“Ser parte del Senado de la nación ha sido uno de los honores más grandes y desafiantes de mi vida política y en general. Acá encontré un grupo de personas comprometidas con sus provincias y con la patria y pude hacer mi aporte para lo que voy a seguir buscando un mejor país para mis hijas”, anunció a través de una aplicación que leyó su mensaje.

Por otro lado, el legislador del PRO agradeció a la vicepresidenta Cristina Kirchner por “las muestras de afecto” que mantuvo hacia su persona. «Hoy, desde este recinto que me honra ser parte, vengo a hacer algo que va en contra de cada fibra de mi cuerpo, nada de lo que soy me indica que este es el camino que quiero seguir, pero creo firmemente en la idea de que el interés público siempre debe estar por encima de los intereses personales”, siguió su discurso.

Además, remarcó que tomó esa decisión “con todo el dolor del mundo y la frustración de no tener alternativa quiero anunciar la renuncia a mi cargo». Y agregó: “Seguiré trabajando por un país mejor porque ese es le compromiso que asumí por mis hijos y es un compromiso para toda la vida. El tiempo que viene lo dividiré entre mi familia y la lucha contra ELA».

Por último, el senador del Frente de Todos José Mayans propuso que Bullrich pueda seguir trabajando de manera virtual en su casa, idea que fue apoyada por Cristina Kirchner, pero el saliente legislador lo rechazó. «Fue una decisión que tomé con mi familia», concluyó.