Con 17 años dejó Hernando para ir a Córdoba a estudiar la carrera de Arquitectura pero la vida lo llevó a recorrer varios países junto a su esposa e hijas. Con el dialogamos y nos introducimos en su experiencia de vida.

Su esposa es oriunda de Villa María, la conoció durante el cursado de sus estudios universitarios. Con ella tuvo dos hijas, una nacida en Santa Rosa de Calamuchita en la época donde trabajaba en el proyecto de Cerro Pelado y la segunda nacida en Roma en el año 1977. “Tengo cuatro nietos, una pareja de nietos por cada hija y ya tengo dos bisnietas (de dos años y de cuatro meses)”, contó.

Cabe recordad que formó parte del proyecto del Complejo Hidroeléctrico Río Grande, en las profundidades del Cerro Pelado. Al respecto dijo que “cuando vivía en Córdoba hasta el año 73 yo trabajaba como Arquitecto pero yo hacía negocios comerciales, o sea en las galerías comerciales de Córdoba. Lo que pasó fue que en el 73 se vino el Rodrigazo y se paró todo, me quedé sin trabajo. Previendo que me iba a quedar sin trabajo yo había hecho de dibujante en un concurso de agua y energía y salí en categoría 1 A, uno de los mejores. Cuando me faltó el trabajo un primo mío que trabaja en agua y energía me dijo que venían los italianos a hacer ese complejo, fui y organizamos todo, de ahí arrancó el proyecto y en 6 meses ya era Jefe de Oficina Técnica”.

Tras conocer a un importante Ingeniero surgió la posibilidad de viajar a Roma por trabajo y la aprovechó. “La propuesta fue en mayo de 1975 y en abril del 76 fui a Roma. Ese fue el punto de lanzamiento porque el Ingeniero tenía obras en Asia, África, Italia así que yo participé aplicando mi experiencia hasta que después estuve trabajando solo, siendo Gerente Técnico en un proyecto similar al Cerro Pelado con una central subterránea en Etiopía”, agregó.

En el 79 viajó a Sierra Leona en África por primera vez, lugar al que calificó como “un paraíso” ya que su trabajo fue en medio de la selva. Viajó allí por más de 10 años. Actualmente vive en Toronto, Canadá desde el año 1988 cuando fue a visitar a dos amigos, uno de ellos Miguel Postigo de Hernando. “Consideramos que es un país donde realmente se puede vivir con una calidad de vida que en Europa no teníamos. Fue una decisión muy importante y hoy me felicito por haber traído a la familia a este país porque es muy estable, hay una gran consideración desde el punto de vista humano y sobre todo desde el punto de vista económico, realmente el poder adquisitivo existe y hay buen estándar de vida. Hay gente pobre también pero el que es pobre aquí es porque no trabaja porque trabajo hay de sobra”, cerró.